Un análisis de los datos históricos disponibles de precipitación pluvial, realizado por investigadores de la UNAM, determinó un aumento sostenido en la cantidad de lluvia en el Valle de México durante las últimas décadas.
El estudio podría ser aprovechado para realizar una guía de recomendaciones en torno a la construcción de zonas habitacionales con el objetivo de evitar inundaciones y permitir la recarga de los mantos acuíferos.
De acuerdo con el doctor Benjamín Martínez López, investigador del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, es imprescindible pensar en nuevas formas de construcción verticales, pues de seguir la expansión horizontal de la zona metropolitana, será imposible la recarga de mantos acuíferos. “Además seguirán observándose inundaciones en la capital”, señaló el investigador.
Martínez López mencionó que en las ciudades con mayor densidad poblacional es necesario pensar en la construcción de edificios departamentales altos, y que contemplen grandes áreas verdes para satisfacer la demanda habitacional. Ello debido a que la expansión de la mancha urbana implica la deforestación de áreas que tienden a ser cauces naturales de agua y zonas de infiltración.
El investigador universitario señaló que al existir una tendencia en el aumento de la lluvia en los últimos años, las zonas bajas del Valle de México podrían ser afectadas por deslaves y los volúmenes no infiltrados favorecerían la ocurrencia de inundaciones en las partes bajas de la ciudad.
A decir de Martínez López, la modelación de la lluvia resulta una herramienta para la toma de decisiones en torno a la urbanización, pero también es un indicador para la reubicación de personas que se encuentran en zonas que a futuro representarán riesgo, como es el caso de la Delegación Tláhuac, en el Distrito Federal o el Valle de Chalco, en el estado de México.
Debido a la diversidad geográfica nacional, este estudio no puede reproducirse en otros estados con exactitud, pero es posible marcar la pauta para realizar modelaciones similares con datos propios de cada región con la finalidad de evitar riesgos futuros.
Esta investigación, que contó con el apoyo del Instituto de Ciencia y Tecnología del Distrito Federal, refiere que el Valle de México puede ser un área hidrológicamente sustentable en el largo plazo si existiera la voluntad política de extender el perímetro de áreas protegidas para la infiltración, así como recuperar ríos y lagos para aprovechar al máximo las grandes cantidades de agua de lluvia que se esperan.
Fuente: Agencia ID
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