Hoy en día la mayoría de los smartphones y tablets tienen pantallas touchscreen, por lo que los teclados físicos han ido desapareciendo poco a poco, facilitando la interacción del usuario con el dispositivo móvil.
El touchscreen es un tipo de pantalla que sirve como dispositivo de entrada, detectando la presencia de un toque en un área determinada, la cual en lugar de utilizar algún dispositivo señalador de entrada como un ratón o un lápiz óptico, se activa siendo sensible al tacto.
Existen dos tipos de touchscreen: la capacitiva y la resistiva, siendo diferentes por la tecnología usada para convertir nuestros toques en una orden.
El touchscreen resistivo está formado por varias capas de resistencias; cuando se toca la pantalla o se hace presión en ella, dos capas entran en contacto y se produce un cambio en la corriente eléctrica que detecta la posición de la pulsación.
Entre sus ventajas se encuentran que los dispositivos que las tienen son más económicos, más precisos y resistentes al agua, polvo y huellas; además, pueden funcionar con objetos como lápices, uñas o un stylus. Una de sus desventajas es que sólo puede detectar un touch a la vez por lo que no es compatible con el multitouch; otra desventaja es que no sólo necesita el toque del dedo u objeto si no también que se haga presión sobre el punto, así como el hecho de que al tener varias capas en la pantalla se pierde brillo y visibilidad.
El touchscreen capacitivo funciona con una pantalla que detecta la corriente, por lo que necesitan ser manejadas con el dedo o un objeto que disponga capacitancia, con lo que se excluye al stylus.
Al ser utilizadas directamente por el dedo, sin objetos intermedios y no ser necesario realizar ninguna presión, la experiencia para el usuario al manejar este tipo de pantallas es bastante agradable. La impresión es de rapidez e inmediatez, siempre que el sistema operativo y el programa que estemos manejando esté bien diseñado, claro está.
Las desventajas son que sólo funciona con las partes conductoras del cuerpo, se ensucian con facilidad y son poco resistentes al polvo, agua y huellas.
Ahora que conoces las diferencias y características de cada una, ¿Cuál te gusta más y cuál usas tú?
Por Erick Uribe del CTIN
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