Mejorar la calidad nutrimental del maíz con sistema natural

* Nuevas variantes del grano con mayor valor alimenticio fueron obtenidas por la UAAAN

La Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN), sede Saltillo y el Instituto Mexicano del Maíz (IMM), “Doctor Mario E. Castro Gil”, obtuvieron variantes (genotipos) de maíz que mejoran la calidad nutrimental del grano y ahorran semilla de siembra.

A través de un proceso conocido como poliembrionía en maíz, una mutación natural en la cual se forma en una semilla más de un embrión (de dos a seis), es posible incrementar la calidad nutrimental del grano, y puede contener entre 20 y 40 por ciento más de aceite oleico y linóleo y del 30 al 50 más lisina y triptófano, aminoácidos esenciales en la alimentación de humanos y animales.

La poliembrionía podría ser incluida en nuevas variedades de maíz que, a pesar de tener un aspecto externo normal (forma y tamaño), es capaz de germinar entre dos y hasta seis plántulas (semillas) de manera simultánea.

Ejemplo de maíz poliembriónico, dos plantas, fructificación prolífica. En general, la condición mayoritaria es de una mazorca por tallo. IMM-UAAAN.

Esa condición propiciaría contenidos nutrimentales superiores en las estructuras de reserva de la semilla, capaces de suministrar nutrientes a varias plántulas durante el proceso de germinación.

De acuerdo con el doctor José Espinoza Velázquez, de la UAAAN, titular de la investigación, los resultados del estudio indican que la poliembrionía puede incorporarse a cualquier variante o genotipo de maíz.

La diferencia entre semillas “normales” y las de  poliembrionía en maíz es la capacidad de germinar en  dos o más  plúmulas, que es la parte verde que emerge de la semilla al germinar.

Además, la semilla de maíz común contiene menos grasa cruda, lisina y  triptófano, frente a las sustancias nutrimentales del maíz de poliembrionía.

Diferentes manifestaciones en la germinación de semillas de naturaleza poliembriónica. Dos o más plántulas por semilla, de emergencia simultánea. IMM-UAAAN.

“La ventaja de la poliembrionía en maíz se refiere al contenido nutrimental, principalmente en el embrión, y puede utilizarse de manera controlada en el diseño de fórmulas de alimentación  para humanos y aves de corral, al igual que en ganado vacuno y porcino”, explicó el especialista de la UAAAN.

En la década de 1970, investigadores del IMM de la UAAAN identificaron la poliembrionía en maíz, y se tomó como una variante interesante que pudiera ser de utilidad, se aislaron algunos casos para su reproducción y se aplicó un esquema de selección para lograr incrementar la frecuencia del “fenómeno” en una nueva población de maíz.

Desde hace más de una década se retomó el tema a fin de conocer los mecanismos de herencia que controlan el fenómeno, los contenidos nutrimentales del grano y valorar la capacidad de las poblaciones para reproducirse en combinación con otras fuentes de germoplasma de maíz.

Además de establecer métodos para el uso de la poliembrionía en nuevas variedades de maíz, con estos estudios se obtuvieron dos poblaciones de alta frecuencia, una de porte normal y otra enana; además, se han derivado 12 grupos de cruzas que combinan calidad nutrimental del grano y características agronómicas de alta producción.

El investigador José Espinoza Velázquez concluyó que el resultado del trabajo indica que la poliembrionía puede incorporarse a cualquier variante o genotipo de maíz, de manera tradicional o clásica, y el proceso partiría de cruzar uno o varios genotipos, así como contar con una base de variantes que participen en un programa de formación de nuevos tipos de granos.

“Si hay colaboración de interesados para multiplicar y probar el desempeño de estas versiones de maíz, así como su uso potencial en la alimentación humana y especies ganaderas, entraríamos en la fase de transferencia del conocimiento”.

Por Agencia ID.