El problema del tránsito vehicular se ha convertido en todo un reto en materia de políticas públicas en la Ciudad de México; no obstante, es un tema multifactorial que debe atacarse de manera multidisciplinaria.
Así lo entendió un grupo de jóvenes que, bajo el nombre de Leopark, decidieron unirse y hacer de la tecnología una herramienta para combatir el tránsito en la ya muy congestionada Ciudad de México. A decir de los jóvenes, el nicho que están atacando es el que deriva de la falta de cajones de estacionamiento.
En entrevista exclusiva con la Agencia Informativa Conacyt, Carlos Ramón Ríos Vergara, Juan Almaguer y Hugo Cardoza, CEO, CIO y jefe de tecnología de la empresa, respectivamente, explicaron que Leopark se trata de un sistema integrado por una aplicación móvil y web que facilita el acceso a los cajones de estacionamiento.
“Está integrado por tres ejes fundamentales que son: un apartado que ubica dónde están los estacionamientos más cercanos, es decir, una opción que permita conocer cuál es la oferta actual; en el segundo apartado los usuarios encuentran el costo y la mejor opción de acuerdo a las necesidades del momento”, dijo Hugo Cardoza.
Asimismo, añadió que el tercer gran elemento de la aplicación es la opción de realizar pagos electrónicos, con lo cual se busca mejorar la experiencia de usuario de los automovilistas, los cuales, de acuerdo con los jóvenes, pasan hasta 20 minutos en busca de un estacionamiento, situación que deriva en congestionamiento vial y en mayor emisión de contaminantes al medio ambiente.
Sobre el origen de la empresa y del proyecto desarrollado, Carlos Ramón Ríos Vergara explicó que conoció a sus ahora socios fundadores en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), donde compartían la visión de crear un negocio propio, el cual ofertara un servicio creado por ellos mismos y, a su vez, generara impacto positivo en el país.
“Fue así como llegamos a la idea de generar algún desarrollo tecnológico que ayudara a contrarrestar los problemas del tránsito. En un primer esfuerzo trabajamos en el desarrollo de sensores inalámbricos que permitieran a los usuarios determinar los lugares por cajón, es decir, que dieran la posibilidad de identificar vía remota cuántos lugares libres existen en determinadas zonas”.
Entretanto, Hugo Cardoza señaló que al entender que la inversión se agotaría antes de llegar a un prototipo funcional, decidieron dar un pequeño giro y atacar el mismo problema pero enfocándose en la accesibilidad a los estacionamientos en concreto. “Entendimos que los 20 minutos que un automovilista tarda buscando estacionamiento generan tráfico y que nosotros teníamos la capacidad para crear una alternativa tecnológica”.
La solución
De acuerdo con Ríos Vergara, la alternativa que ellos generaron al problema de accesibilidad a los estacionamientos se divide en tres partes fundamentales: la parte física —desarrollo del hardware—; la parte relacionada con la programación —software—, y por último, la parte de inteligencia o logística, es decir, el análisis e interpretación constante de los datos que se obtienen al operar el desarrollo en los estacionamientos.
“En la parte de hardware desarrollamos una sociedad con la empresa BitShake para que nos apoyen con el desarrollo de la tecnología necesaria, mientras que nosotros nos estamos encargando del software, así como de la plataforma que generará un reporte de la logística del estacionamiento”.
A su vez, Hugo Cardoza dijo que al momento ya se cuenta con un primer prototipo en hardware y span style=”font-style:italic”>software y que se han realizado pruebas del sistema en algunos eventos muy particulares, de las cuales han identificado nuevas necesidades que atender o correcciones por realizar para optimizar los resultados.
“Nos involucramos con el Festival de Bahidorá, en Las Estacas, donde absorbimos toda la logística del estacionamiento, es decir, desde la cobranza hasta el acomodo de los vehículos, optimización del espacio y emisión de información oportuna al conductor. Para tal efecto creamos un sistema de reservación, al cual accedió más de 20 por ciento de los asistentes en auto”.
Entre las ventajas que pudieron ofrecer a quienes reservaron, fue la posibilidad de emitir un pago electrónico, de elegir el lugar que más les convenía de estacionamiento y la posibilidad de ubicarlo rápidamente al llegar al lugar. “Al otro grupo de conductores también los recibíamos, les cobrábamos y los acomodábamos más rápidamente en los lugares vacíos que no estaban reservados”.
El potencial de la aplicación
De acuerdo con los jóvenes emprendedores, actualmente cuentan con la capacidad para trasladar la prueba a otro tipo de eventos, como estadios de futbol, conciertos, espectáculos culturales, en fin, a otros eventos donde se necesite mejorar la experiencia del automovilista al utilizar el estacionamiento.
Asimismo, los planes a futuro para la aplicación son concretar un sensor inalámbrico que optimice el uso de los espacios regulados por los parquímetros, así como estacionamientos públicos. “Incluso el gobierno podría utilizar los datos que estamos generando para entender cómo está funcionando la movilidad en los estacionamientos y aligerar el tránsito en ciertas zonas u optimizar aquellos estacionamientos que se saturan a diario o que en contraste están constantemente vacíos”.
Fuente: CONACYT.
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