En la Feria Internacional de Electrónica de Consumo 2013 (CES, por sus siglas en inglés) estuvieron cerca de 3 mil expositores de diferentes países que mostraronal mundo una amplia gama de productos innovadores: pantallas flexibles, smartphones, aplicaciones, tabletas y televisores 3D, entre muchas otras tecnologías.
México fue unos de los países que participó en la presentación de las nuevas tecnologías en la ciudad de Las Vegas, Nevada, Estados Unidos.
A la CES asistieron empresas como Meebox, compañía que diseñó la primera tablet mexicana; Perfect Choice, líder en accesorios de cómputo, dispositivos de conectividad y sistemas de audio desarrollados especialmente para el mercado latinoamericano, y TotoTV, empresa encaminada a crear Centros Web de Entretenimiento a través de dispositivos Android conectados directamente a la televisión.
A pesar del gran esfuerzo que inventores y empresas mexicanas realizan en materia de tecnología, si se compara con el desarrollo de otros países siguen existiendo marcadas diferencias ¿Por qué?
En 2012, México ocupó la posición 79 del Ranking Global de Innovación. En 2011, se ubicó en el lugar número 81 de la tabla.
Un estudio realizado por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual de la ONU (OMPI) y la Escuela de Negocios INSEAD, con sede en Francia, revela que México está por debajo de los 50 primeros líderes mundiales en este ramo. Incluso países latinoamericanos como Brasil, Colombia, Uruguay y Perú se encuentran en mejor posición en este ranking.
El presidente de la Academia Mexicana de las Ciencias y director de Divulgación de la Ciencia, José Franco, asegura que nuestro país se encuentra estancado desde hace 30 años en temas de innovación tecnológica.
La causa, explican algunos expertos como Alejandro Nadal Egea, economista mexicano y doctor en Economía por la Universidad de París X, es la falta de políticas enfocadas a la inversión en ciencia y tecnología.
De acuerdo, con un informe realizado en 2009 por la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), titulado Regions at a Glance, México realizó en ese año apenas una inversión equivalente a 0.4 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB) en materia de investigación y desarrollo, es decir, sólo se destinaron 51 mil 450 millones de pesos.
La caída del desarrollo, investigación e innovación tecnológica en nuestro país gira en torno a la falta de dinero para estas áreas, refiere Nadal Egea.
Sin embargo, es importante que las universidades privadas también combatan este rezago, no sólo con la finalidad de obtener utilidades de la investigación que realizan, sino por la convicción de impulsar y detonar este ramo en el país, menciona José Luis Fernández Zayas, director general del Sistema Nacional de Investigadores del Conacyt.
Sin desarrollo tecnológico no hay competitividad
La competitividad de un país en un mercado global está delineada por el nivel de innovación y desarrollo tecnológico que tiene.
Según un reporte realizado por la OCDE, el “desarrollo de innovaciones en las regiones es crucial para mejorar en general la competitividad de las regiones y lograr el crecimiento de las naciones en el largo plazo”.
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