Sesenta estudiantes universitarios mexicanos viven una experiencia educativa de vanguardia y están siendo apoyados para potenciar su desarrollo académico y profesional encaminado a convertirse en líderes en las diferentes esferas sociales.
Se trata de Talentum Universidad, una intervención educativa del Programa Interdisciplinario sobre Política y Prácticas Educativas (PIPE) del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), que tiene el propósito de fortalecer las capacidades académicas y de liderazgo de jóvenes para que contribuyan a la construcción de un país más justo, próspero y que ofrezca mayores posibilidades a todos.
México debería tener entre 5.1 y 8.6 por ciento de sus estudiantes en los niveles 5 y 6 (los más altos) de la prueba PISA, un instrumento de evaluación que se aplica en los sistemas educativos de las naciones que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE); sin embargo, en nuestro país solo 0.6 por ciento se ubicó en tales niveles en 2012.
El reporte de investigación La brecha de talento en México y sus costos económicos, elaborado por los investigadores Blanca Heredia y Edgar Franco, señala que estos resultados sitúan el país en los niveles más bajos de ese indicador, y además que los considerados talentosos tienen resultados menores que sus pares en otros países con ingreso, gasto y características del sistema educativo similares. Un dato más preocupante es que el porcentaje de estos estudiantes ha disminuido en comparación con ediciones pasadas de la prueba.
Mucho se ha estudiado la relación entre la calidad de la educación y el crecimiento económico de un país, pues entre más forme científicos, innovadores e ingenieros del más alto nivel, mayor será su capacidad de desarrollo en el mundo contemporáneo.
En el caso de México, es prioritario implementar políticas públicas encaminadas en acrecentar el número de estudiantes talento.
Con ese espíritu surge el programa Talentum Universidad que identifica a estudiantes de educación superior, que brinda conocimientos y herramientas para potenciar sus capacidades, a la vez que incentiva su sentido de responsabilidad social y pueden desempeñarse en el ámbito de su vocación como los líderes que nos hacen falta.
Como proyecto de investigación dará seguimiento a cada uno de los jóvenes participantes a uno, tres y cinco años, con el fin de conocer el impacto que el programa y las experiencias asociadas a este pudieran tener en su vida académica y profesional, así como en su entorno.
Coordinado por la doctora Mónica Camacho Lizárraga, el año pasado tuvo su primera generación y, aunque actualmente forma a la segunda bajo el lema “Re-imaginando México”, se han detectado aspectos positivos de esta intervención educativa, por ejemplo las redes de colaboración que se han tejido entre estudiantes, así como con sus mentores.
“Estamos en la segunda edición de Talentum Universidad. Es un programa extracurricular del CIDE de convocatoria abierta para jóvenes universitarios que busca ofrecer a los estudiantes participantes experiencias intensivas, pero también de reflexión, que los motiven y que les den las herramientas básicas para convertirse en lideres transformadores, que estén dispuestos y que sean capaces de contribuir a la construcción de un México más posibilitador”, dice Mónica Camacho a la Agencia Informativa Conacyt.
Explica que a partir del diagnóstico sobre la brecha de talento, la coordinadora general del PIPE, Blanca Heredia, y otros investigadores diseñaron este programa para estudiantes de educación superior “que ya han sobrepasado obstáculos para llegar hasta ahí” y que están en la antesala de desempeñarse en las diferentes esferas de desarrollo en el país, como el sector público y privado, social, académico y emprendedor.
¿En qué consiste?
En entrevista, Mónica Camacho, quien es doctora en liderazgo educativo y estudios de política por la Universidad Estatal de Arizona, detalla que Talentum Universidad potencia el talento de los jóvenes para recrear el sentido de pertenencia a un grupo y el trabajo en equipo, para ponerlos al servicio del país.
Inicia con la publicación de la convocatoria dirigida a estudiantes de quinto semestre en adelante de todas las carreras de universidades públicas y privadas de todo el país. Tras un escrupuloso proceso de selección en tres fases, que incluye integrar un completo registro, tomar pruebas y entrevistas en línea, se elige a 60 participantes, se les reúne en equipos de integrantes de diferentes carreras y se les plantea un tema del cual deben detectar un problema u oportunidad, realizar un diagnóstico y proponer escenarios posibles.
El programa consta de cinco etapas. Una vez que ya fueron admitidos 30 estudiantes varones y 30 mujeres, la primera etapa consiste en una semana de inducción, en la cual todos se reúnen en la Ciudad de México para conocer el programa, participar de conferencias, talleres y actividades de integración que los prepararán para actividades posteriores.
“Este año incluso les dimos lecturas que necesitaban completar antes de llegar a la semana de inducción. Les damos actividades de discusión y sostienen pláticas con sus mentores, que son profesionistas o académicos externos relacionados a su carrera o con los intereses que expresaron en su carta de motivos; les asignamos equipo y el proyecto a desarrollar a distancia”, explica.
La segunda fase es desarrollar, en equipo y a distancia, el tema que les fue asignado y un tema libre que cada equipo propone. Bajo el lema “Re-imaginando México”, este año los participantes conformarán artículos enciclopédicos sobre cómo será México en el año 2050 en temas de salud, deportes, democracia, religión, identidad, género y sexualidad, entre otros.
“Al final lo que tendremos de todos los equipos es un repositorio del México que ellos ven en el futuro, a partir de escenarios posibles y probables; vamos a contar con una plataforma similar a Wikipedia, incluso nos dio una conferencia Iván Martínez, el presidente del capítulo México de Wikipedia para platicarnos el espíritu de construir una plataforma en línea de conocimiento libre y cogenerado”, abunda.
La tercera etapa consiste en un componente internacional, con duración de una semana. En el verano los 60 talentos mexicanos viajarán a Pittsburgh, Pensilvania, en Estados Unidos; “si el tema de este año es ‘Re-imaginando México’, esta ciudad es un ejemplo de que se tuvo que reinventar una vez que cumplió su ciclo de una economía con base en la manufactura y pasó a una basada en el conocimiento y en el talento, por eso es un buen ejemplo para ellos para modelar y conocer esta experiencia”.
La cuarta etapa consiste en una práctica «sombra» en la Ciudad de México, en la que los estudiantes son asignados a acompañar durante dos días a líderes de diversas áreas, a fin de que tengan un acercamiento al mundo laboral.
“Colaboran con nosotros líderes anfitriones del sector público, privado y social porque los intereses y carreras de los alumnos son variados y buscamos que cada uno tenga una experiencia lo más cercana a su inminente desarrollo”.
Previo a la clausura del programa se califica el trabajo realizado por los equipos; un jurado conformado por invitados externos al programa dictamina y otorga a los estudiantes un reconocimiento en aspectos como innovación y creatividad, o quien realizó la mejor investigación. En el evento de clausura se entregan dichas menciones y con ello concluye la experiencia para los estudiantes.
En tanto, para los académicos del PIPE comienza el trabajo de seguimiento a uno, tres y cinco años para vislumbrar los resultados y, a partir de ellos, hacer recomendaciones sobre una política educativa nacional para la identificación y la formación de talento.
“Estas intervenciones son nuestra materia prima para hacer investigación. La información que obtenemos en esos periodos de tiempo es una inmensa riqueza de datos”, dice.
La experiencia
Rocío Soladana Aguilar y Yael Camacho Jara son dos de los integrantes de la segunda generación de Talentum Universidad y los únicos que radican en la Ciudad de México. Ingresaron al programa entusiasmados de tener una gran experiencia profesional, para conocer las problemáticas que tiene el país y poner su granito de arena para la generación de soluciones.
Estudiante de ingeniería mecánica en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Rocío es una joven con gran compromiso social y convencida de que el trabajo colaborativo es un medio eficaz para dar resultados.
“El año pasado realicé un voluntariado y a partir de esta experiencia me di cuenta que soy capaz de actuar y generar un cambio en mi comunidad. A través de Talentum Universidad tenemos los medios para generar el cambio y reimaginar México”, comparte.
Forma parte del equipo encargado del tema deportes y como tema libre energía; “la visión que tenemos que investigar y promover para México en el 2050 es todo un reto pero vamos bien, estamos ahorita en la parte de la compilación de fuentes y consultando artículos, reconociendo la problemática que existe y plantear soluciones”, detalla.
Yael estudia ingeniería en negocios y tecnologías de información en el Tecnológico de Monterrey, se define como una persona proactiva y en una búsqueda constante de lo que viene para su vida.
“Venía de un intercambio y me planteé qué hacer el verano siguiente; conozco a un miembro de la primera generación de Talentum y me pareció muy interesante el programa, porque lo vi como un reto intelectual y una experiencia que me podía enriquecer”, afirma.
El equipo en el que participa trabaja los temas gobierno e internet de las cosas, los cuales abordan desde la perspectiva de cómo la tecnología afecta el componente social de una sociedad, planteando hipótesis e integrando líneas de solución.
Sus experiencias se multiplican en 58 jóvenes más en 27 estados del país. El trabajo que realizan se suma a sus actividades escolares regulares y aunque representa un esfuerzo adicional, están llevándolo a cabo de manera exitosa basándose en su responsabilidad y compromiso.
“Establecimos un código de ética y en mi equipo puede haber problemas de comunicación por fallas en Internet, pero realmente todo va saliendo bastante bien porque todos nos comprometemos”, indica Rocío.
Este esfuerzo adicional que realiza “vale mucho la pena”, según palabras de Yael, porque desde el inicio asumió su participación como un reto en su vida.
Actualmente se encuentran en la segunda etapa del programa. Del 10 al 16 de julio tendrán una estancia en Pittsburgh; el 18 y 19 de julio se realizará la práctica «sombra» y el 21 de julio se clausurará esta segunda edición (estas dos últimas etapas se realizan en la Ciudad de México).
Todavía les queda camino por recorrer, pero para estos jóvenes entusiastas el proceso está siendo enriquecedor en el ámbito tanto personal como profesional.
Contribuciones
A decir de la doctora Mónica Camacho, Talentum Universidad es un proyecto que definitivamente incidirá en las políticas educativas, pues han detectado que contribuye en la formación de redes de talento en el país y a nivel individual en las habilidades socioemocionales de los participantes.
“Se les abren los ojos al decir: ‘No nada más te conformes con la preparación que te dan en tu universidad, si tienes al alcance la tecnología, utiliza esos medios, infórmate, cuestiona todo lo que te dicen en las clases, cuestiona lo que ves en tu comunidad y asume una actitud de proponer’”, concluye.
Fuente: CONACYT.
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