Gestionar el conocimiento para que sea un generador de innovación, ciencia y tecnología es un método que puede traer bienestar al país, y al mismo tiempo es un eje que estructura sociedades más críticas e informadas, considera el doctor Enrique Cabrero Mendoza, director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
Como parte de su participación en el Seminario Internacional sobre Gestión del Conocimiento en el Sector Público, celebrado en la Universidad de Guadalajara (UdeG), el titular del Conacyt compartió su experiencia sobre el manejo del conocimiento en el sector de ciencia y tecnología en el país y las estrategias sugeridas para impulsar estos rubros para potenciarlos en una sociedad del conocimiento.
“El conocimiento es más que la circulación de la información. La información es importante, es un insumo fundamental, pero en realidad la información no tiene valor sino en la medida que se genera y se convierte en conocimiento”, señaló.
Una vez que el conocimiento se genera desde la ciencia y tecnología, este puede ser utilizado para incidir en los sectores productivos o gubernamentales, agregó Cabrero Mendoza. Ante esta situación, consideró que el conocimiento puede convertirse en un bien público que se manifiesta en desarrollos tecnológicos y científicos para beneficio de la sociedad.
El doctor Cabrero Mendoza mencionó que en México se sigue un modelo en el que se busca beneficiar este conocimiento para originar desarrollo, por lo que se impulsa la construcción de infraestructura, como laboratorios o centros de investigación, para que contribuyan con conocimientos tecnológicos y científicos.
“Pero donde todavía estamos en un proceso de avance es en poder transformar ese conocimiento en algo más útil a través de procesos de innovación y convertirlos en un valor económico y de desarrollo social”.
El director de Conacyt compartió que existe un círculo virtuoso que representa el modelo ideal para la gestión del conocimiento. Este ciclo inicia con la generación de ciencia para posteriormente otorgar un valor a este conocimiento y que se convierta en innovación, para en el último paso convertir el conocimiento en un creador de bienestar social y económico.
Nuevas comunidades científicas
Cabrero Mendoza recuerda que desde su fundación, el Conacyt impulsó el conocimiento, como parte de una estrategia para generar conocimiento que pudiera ser usado a favor de la sociedad. En la actualidad, explica, la misión sigue siendo la misma, pero a lo largo de la trayectoria del Consejo han surgido nuevas visiones para cumplir con aquella.
“El Conacyt de hoy en día es un Conacyt que sí da becas, pero también trabaja en la formación de capital humano, fortalece los centros de investigación desde un punto de vista individual con los investigadores y sus proyectos”, señaló.
El funcionario resaltó que desde Conacyt hay estrategias que plantean la colaboración con el sector productivo e industrial; por otra parte, bajo su esquema de trabajo, a través de esta institución se impulsa la formación de comunidades científicas que pueden incidir en políticas públicas con base en sus trabajos de investigación.
En cuanto a la producción de capital humano, mencionó que desde su fundación, el Conacyt ha otorgado más de 45 mil becas a estudiantes de posgrado, pero también existen apoyos a los aproximadamente 30 mil miembros del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) de la institución para la generación de conocimiento científico y tecnológico.
“Además, en este sexenio se creó un nuevo programa, Cátedras para Jóvenes Investigadores. Aquí lo que hace Conacyt es contratar directamente a esos jóvenes investigadores egresados de las mejores universidades de México y el mundo a través de varios mecanismos de selección, y los comisiona a universidades y centros de investigación para que desarrollen su trabajo en esas instituciones”.
A la búsqueda de una ruta
Otras de las estrategias en la gestión del conocimiento contemplan la difusión y divulgación de los hallazgos científicos y tecnológicos. Cabrero Mendoza resaltó que la institución trabaja en aumentar su cobertura en cuanto a las revistas que documentan los conocimientos. Respecto a la comunicación pública de la ciencia, destacó que se crearon iniciativas como la Agencia Informativa Conacyt y la Semana Nacional de Ciencia y Tecnología.
El doctor Cabrero Mendoza señaló que para que el conocimiento científico y tecnológico incida en la sociedad también es necesario vincularlo a las tomas de decisiones. El titular de Conacyt mencionó que en países como Australia o India hay organismos estrechamente relacionados con las oficinas presidenciales, esto con la finalidad de brindar asesoría en estos temas.
Para darle continuidad a estos esfuerzos, consideró que los retos para impulsar el conocimiento se deben centrar en incentivar la circulación del conocimiento, incorporar a especialistas científicos en las tomas de decisiones, fortalecer la política de ciencia, tecnología e innovación a largo plazo, y promover la incorporación al sector público de recursos humanos altamente capacitados en temas científicos y tecnológicos.
Fuente: CONACYT.
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