Conoce cuál ha sido la participación de México en el trabajo del telescopio James Webb y la obtención de las primeras imágenes del universo profundo, así como los proyectos de la UNAM que se han aprobado para ser llevados a cabo por el telescopio más poderoso de la humanidad.
En México, las estrellas se han observado desde siempre. Las culturas indígenas tenían un especial entendimiento del cosmos tanto en su física y naturaleza, como en un sentido profundo y místico que se reflejaba en la tierra misma (según sus creencias) y que a su vez era considerado por las sociedades a la hora de tomar decisiones como pueblo e individuos.
A lo largo y ancho de todo el territorio mexicano existen observatorios prehispánicos que se dedicaban al estudio del espacio exterior y su importancia era tal, que no solo sus núcleos sociales estaban fuertemente influenciados por los astros, incluso la distribución y arquitectura de sus ciudades y templos están basados en la bóveda celeste ¿Por qué? El telescopio espacial James Webb podría encontrar la respuesta.
El telescopio espacial James Webb
El telescopio espacial James Webb fue lanzado el 25 de diciembre del 2021 en la Guayana Francesa después de más de 20 años en construcción (desde 1996), una inversión de 10 mil millones de dólares y constantes actualizaciones.
Es un proyecto colaborativo de la NASA, la Agencia Espacial Europea y la Agencia Espacial Canadiense; a lado de 17 países más. Lleva el nombre del director del desarrollo del programa Apolo en los años 60.
El principal objetivo del telescopio espacial James Webb es observar la inmensidad del espacio exterior (por medio de fotografías y otras formas de medición); y así poder estudiar la evolución y movimientos de los cuerpos/fenómenos que conforman.
Se le considera el sucesor del Hubble y es una herramienta que complementará a este, al mismo tiempo que ofrecerá sus propias imágenes en la más alta definición, como lo demostró el pasado 12 de julio.
Además de la tremenda calidad de sus imágenes, el James Webb está diseñado para observar el cosmos a través de la luz infrarroja; (y otras formas de estudiar la formación de las primeras galaxias) así como de estrellas, planetas y exoplanetas, gracias a su habilidad para ver la luz visible de longitud de onda larga.
¿Qué significa todo esto? Todo lo que se puede observar, puede mirarse gracias a la luz. El telescopio espacial James Webb está diseñado para descifrar la luz que llega a su lente desde los rincones más lejanos en la eternidad del infinito.
Fuente: Agencia.
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